TALLER DE FITOTERAPIA PRÁCTICA – 1

Las plantas siempre han sido un sostén para la vida alimenticia y para la curación de las necesidades del hombre y los animales.

Las plantas son producto de la Luz, el agua y las sales minerales de la Madre Tierra, por ello podemos decir que son Hijas de la Luz por la capacidad de sintetizar este recurso de la energía del Sol y de la Luna en sus procesos biológicos.

Cada planta tiene la fortaleza de la energía del Sol y de la Luna así como de cada mineral y metal que en el subsuelo existe.... Esto conforma sus cualidades que están en prefecta harmonía con el Cosmos en toda su integridad.

Las plantas son los únicos organismos que a través de la fotosíntesis genera una autentica transmutación de los elementos en sí misma, creando una alquimia en sus cualidades y del terreno donde reside, para transformarse en una portadora de bienestar a todo su entorno... Estas propiedades en las que están de una forma clara las cualidades de los minerales, la energía del Sol y del agua, convierten a las plantas en el mayor contenedor de Vida en todo su esplendor.....

Las plantas se pueden ayudar a sí mismas, así como también a los animales y al hombre, en todas sus necesidades tanto alimenticias como de restablecimiento de la salud.

Incluso los minerales en forma de oligoelementos por la gran transformación interna de los procesos biológicos de las plantas... son los adecuadamente digeridos para poder ser asimilados correctamente por nuestro organismo humano u animal.

Como vemos, en las plantas y en definitiva en todo el Reino Vegetal... tenemos básicamente todos los principios para la vida, pues incluso... ayudan a sintetizar enzimas necesarias para el equilibrio de nuestros organismos en un proceso de fermentación natural....

Cada planta en un trozo de Luz sintetizada...



UTILIZACION PRÁCTICA DE LAS PLANTAS:

Las plantas pueden ser utilizadas de diversas maneras como: en infusión, en maceración de agua, en maceración alcohólica, en polvo o en pomadas para aplicaciones externas, jabones, colirios etc...

Lo importante de tener en cuenta cuando elegimos una o varias plantas para la confección de un remedio determinado, es tomar consciencia de con quién estamos tratando... En primer lugar debemos de definir cuáles son las plantas necesarias para nuestro remedio y desde el interior establecer contacto con ella o ellas... para que se comience una alquimia de Fuerza de Vida de la planta.

Una vez hecho esto y en algunos casos podremos percibir el frescor y respuesta de ese género de plantas que necesitamos... Ellas siempre están dispuestas a ayudarnos, pero al igual que a nosotros nos gusta que nos pidan permiso, para pedirnos o solicitarnos algo.... también a ellas así como a cualquier parte de la Creación entera, agradecen nuestro respecto... en definitiva del Libre Albedrio de todo lo creado. Las plantas también son muy sensibles al aura de los humanos... y por ello el humano que solicita su ayuda, debe solicitarla desde la intención mas sincera en su corazón.

Cuando hayamos definido que planta usar... pidamos en nuestro interior la Fortaleza Sanadora al Ser de Vida que reside en ella... A partir de ahí su Ser de Vida entra en contacto con nosotros y comienza un intercambio de ayuda mutua...

Luego podemos ir al campo en la zona donde ya sabemos que hay ese tipo de plantas y con la sensación del primer contacto realizado, habláis desde el corazón a las plantas y les preguntáis si podéis coger una determinada cantidad de hojas o flores etc., para la confección de un remedio para vosotros o para el prójimo.

Es importante, que cuando decidamos que planta debemos cosechar, pensemos también de la cantidad adecuada que debemos recolectar... pues ello va en el sentimiento de la Economía Universal y del respeto de todo cuanto existe y así, solo será tomado en ese respeto la medida realmente necesaria... No pidáis plantas y arraséis con todas... solo coged la cantidad necesaria para la confección de vuestro remedio... así la Naturaleza os seguirá sirviendo de forma equitativa... El hombre por su deseo de poseer, con frecuencia suele tomar más de lo que realmente necesita y al final incluso lo desecha, perdiéndose aquello que podría haber sido útil para otros...

Notaremos quizá una respuesta en sensaciones y con todo el amor posible, podemos acercarnos con respeto a la planta que con nuestra mirada es la más adecuada... pero sin expectativas.... con la serenidad que la sinceridad de nuestra solicitud desde nuestro corazón sale....

Probamos entonces el tirar de algunas hojas, o frutos, o flores de una forma delicada... Cuando veamos que se desprende con facilidad... quiere decir, que la planta nos regala esta hoja o esta flor o este fruto... pero si vemos que ofrece resistencia... no insistáis, pues debéis intentarlo con otras hojas u otros frutos o flores de esta planta o grupo de plantas.... Esto es respeto mutuo y la planta sabe cuáles son las hojas más adecuadas o los frutos más adecuados para vuestra curación o la de vuestros prójimos...

También podemos utilizar una cuchilla muy afilada como un "cúter" y cortar aquellas hojas que sintáis en vuestro interior... o flores etc., pero de forma diagonal en su corte. Esto también vale en el caso de que necesitemos una planta entera... la cual cortaremos casi a ras del suelo pero de forma diagonal, y así el resto de la vida de la planta se retirara de manera no traumática...

Es importante el comentar que la mejor época para la recolección de las plantas es, en la época de la primavera y verano... pero si lo que necesitamos son raíces... deberemos recolectarlas en otoño ya que la savia y sus cualidades se retiran a las raíces... Todo ello si es posible, con la Luna en Cuarto Creciente o Luna Llena... Esto es debido a que en esta fase Lunar la fortaleza de las cualidades de cualquier Reino de la Naturaleza es mucho mayor... así nuestra planta tendrá más elementos nutrientes y curativos que en otros momentos.

Si necesitamos plantas en otros momentos que no sea la estación más adecuada, no debemos preocuparnos demasiado... pues si ello puede ser, simplemente recolectémoslas cuando la Luna esta en las fases anteriormente explicadas... sea cual sea la época del año.

Pero si necesitamos confeccionar un remedio urgente... entremos en nuestro Templo y desde el interior, pidamos la Fuerza de Vida de esa planta o tipo de planta y solicitémosle la ayuda de sus cualidades curativas para la realización de nuestro remedio... Ello lo podemos hacer con cualquier planta que hayamos adquirido en un herbolario. Es curioso el notar que aquellos que vivimos en ciudades y no tenemos la oportunidad de cosechar nuestras plantas medicinales directamente del campo... podemos adquirirlas en un herbolario de nuestra localidad pero en el día en que la Luna está en la Fase conveniente... ¡Funciona! pues todo está más activo en esos momentos.

Todo debe ser realizado en el constante respeto al Libre Albedrio de todo y de todos... y en la consciencia de que siempre la Sabiduría de la Creación, se pone a nuestro servicio... debidamente solicitada.

No nos olvidemos de dar las gracias a la planta y a la Creación por poder acceder a ellas, solo así cerraremos el Círculo de Dar y Recibir legítimamente.


PREPARACION:

Una vez cosechadas aquellas partes de la planta o plantas seleccionadas, las podemos poner en un cesto de mimbre o envueltas en algo de papel amplio para que no se dañen...

Si las queréis usar para infusiones en el presente y futuro deberéis dejarlas secar a la sombra en un lugar fresco pero seco y sin corrientes de aire... encima de papel o de una rejilla muy fina de forma extendida...

Una vez secas después de varios días, las podéis guardar en tarros de cristal colocándoles la indicación de la planta que allí se encuentra.

Las plantas las podemos utilizar en infusión, hirviendo agua y cuando rompa a hervir, introducir una cucharadita de la planta seleccionada y tapando el cazo o recipiente durante unos diez minutos... Luego abrimos con cuidado la tapa o plato que hayamos puesto encima y dejamos escurrir lo condensado en el mismo en el resto de la infusión, pues en esta condensación se han depositado aceites esenciales y oligoelementos que han de volver a nuestra infusión para enriquecerla... La endulzamos si así lo creemos conveniente y la tomamos a pequeños sorbos para que sus cualidades curativas puedan ser asimiladas por nuestro organismo de manera rápida y eficaz... Estos pequeños sorbos permiten que la infusión se introduzca debajo de la lengua y por vía perlingual pasen a la sangre rápidamente los elementos que nos van a ayudar a nuestro restablecimiento.

CONFECCION DE TINTURAS:

Para la confección de tinturas, podemos preparar una manera rápida de hacerlas si tenemos prisa por la necesidad del remedio a emplear.

Podemos colocar un recipiente de cristal alto para contener las plantas secas o frescas y la capacidad suficiente de líquido el cual va a adquirir o a recibir la disolución de las cualidades curativas de la planta.



En este caso podemos utilizar los recipientes de cristal con tapa a presión también de cristal y con arandela de goma, que se encuentran en el mercado.

Es importante que el frasco sea lo suficientemente alto para la expansión de los gases que se van a mover y dilatar en el interior.

Cogemos unos 200 gramos de planta y la troceamos echándola en el frasco de cristal y a continuación si la tintura es muy urgente, agregamos un litro de buen aguardiente de vino. Según donde nos encontremos podemos utilizar otros aguardientes de otros frutos... pero el ideal es el de vino.

Cerramos la tapa del frasco y la ponemos a macerar aceleradamente en un cazo con agua, llevando a cabo el macerado al Baño María. El calor a aplicar al cazo con agua donde se encuentra nuestro frasco no debe pasar de unos 40 grados, y esto lo conseguimos poniéndolo al mínimo de fuego y en el fogón más pequeño si la cocina es de gas, pero si la cocina es eléctrica también lo pondremos en la zona más pequeña y a lo mínimo que se pueda regular...

La maceración se realizara muy rápido pero siempre es conveniente dejarla al baño maría durante al menos un día. Esto permite que el alcohol diluya todos los elementos nutrientes y los aceites esenciales que contiene la planta en un tiempo prudencialmente rápido. Observaremos como va tomando color la tintura hasta un tono fuerte.

Una vez pasado el día al baño maría, abrimos el frasco y seguramente observaremos que ha adquirido algo de presión por la expansión de los gases internos del alcohol... Después colamos la tintura en otro recipiente cerámico o de cristal y si ello fuera necesario la colamos con papel filtro en una segunda vez, para obtener una tintura libre de pequeñas partículas de la planta.

Vertemos esta tintura en frascos de color ámbar y si ello fuera posible en frascos de color amatista fuerte, pues este color no solo conserva por tiempo indefinido aun más la tintura, sino que la enriquece de una más alta vibración.

Así hemos obtenido una tintura de calidad y la podemos utilizar en gotas, para ayudar a la curación para la cual la hemos confeccionado.

Esta tintura la podemos aplicar en gotas diluyéndola en un vaso de agua y tomándola unas 3 o 4 veces al día, según convenga.


CONFECCION DE TINTURAS POR LA VIA NATURAL:

La confección de tinturas por la Vía Natural, que es la correcta en todos sus sentidos, cambia solamente en la parte en que ponemos nuestro frasco de cristal con la planta troceada y el alcohol.

En este caso es conveniente que si la planta es seca la coloquemos en nuestro tarro con algo de agua mineral o manantial cercano que consideremos puro, y con un 40 % de aguardiente de vino como mínimo. Es decir que colocamos nuestra planta unos 200 o 250 gramos de la misma en el frasco, agregamos medio litro de agua, y lo mismo de aguardiente de vino.

Es importante que el frasco sea lo suficientemente alto para la expansión de los gases que se van a mover y dilatar en el interior.

Este frasco una vez preparado, lo colocaremos al sol de la mañana hasta el medio día, el cual retiraremos hasta el día siguiente, haciéndolo durante al menos una semana. Si tenemos tiempo, lo dejaremos una Lunación entera, es decir 28 días, y si ello es posible lo comenzaremos en Luna Nueva, pasando por todo el ciclo natural hasta la próxima Luna Nueva. Esto hace que la tintura se ritmifique (entre en el ritmo de la Luna y su influencia en los líquidos…) en sus cualidades.

Una vez pasado el tiempo elegido, haremos como antes de filtrar, lo haremos en un primer paso con un colador fino y luego con un filtro de papel para posteriormente verterlo en frascos de color ámbar o mejor de amatista.

La tintura realizada de esta manera tiene aun mucha más Fuerza de Vida por el tiempo de exposición al Sol y al ritmo Lunar.

Demos gracias al Creador y a la Madre Tierra... en la planta, en el agua, en el aguardiente empleado y al Sol... así como también a la Luna, por las cualidades que impregnan con sus energías para enriquecer nuestro Remedio de Luz... en el único deseo, de que sea para el bien de todo y de todos en todas partes.